Si algún día me faltara inspiración para preparar mis ya más que mundialmente conocidos 😉 #natismoothies, siempre tendré a Gloria para solucionarlo. Con razón dicen que quien tiene un amigo tiene un tesoro. Por eso el smoothie que os traigo hoy se lo dedico a ella, inspiradora del mismo gracias a uno de esos muchos pines que compartimos a lo largo de la semana. Mandarina y Caqui. Todo al naranja para poner un poco de color a este domingo.
Aunque a mi hoy no me cabe ni el bigote de una gamba. Ayer tocaba probar el nuevo menú de Married, que como siempre no defraudó. Si aún no lo habéis probado, no lo dejéis pasar. Otro de mis sitios favoritos al que nunca me canso de volver. Pero para una que suele cenar como un monje benedictino, sufro solo de pensar en las sesiones de Zumba que me esperan esta semana.
Pero a lo que vamos, que como siempre me lío…
En realidad estas mandarinas deberían haber sido sacrificadas en un bizcocho, pero a falta de un ingrediente, se fueron a la batidora. Y qué queréis que os diga, el sacrificio ha merecido la pena. Y mucho.
Batido de Mandarina y Caqui
Ingredientes:
- 2 caquis pequeños
- 1 mandarina
- 1 yogur de coco
- 12 anacardos
- pizca de canela
Elaboración:
- Ponemos los anacardos en un vaso y cubrimos con agua. Dejamos así al menos durante 1 hora, aunque si lo hacéis durante toda la noche mucho mejor.
- Pelamos los caquis y troceamos. Pelamos la mandarina y revisamos si tiene semillas. La vamos a utilizar entera
- En el vaso de la batidora, ponemos yogur, caqui, mandarina, los anacardos escurridos y pizca de canela.
- Trituramos muy bien hasta que tengamos una crema.
- Servimos.
- Podemos decorar los vasos con rodajas de caqui. A los niños les encantará.
Cuando lo probéis (sé que lo haréis) ya me contáis qué os ha parecido.
¡Feliz domingo!
Natalia.