Bizcocho de Nata, Granola y Limón.

Me encanta la granola. La hago siempre que puedo, porque se ha convertido en uno de los ingredientes que no pueden faltar en mi despensa: para mezclar con los cereales, añadir al yogur, sobre una ensalada… las posibilidades son infinitas. En el blog tenéis un par de recetas, y una de mis favoritas es esta aromatizada con té. Pero cuando no me da tiempo a prepararla, la única granola que acepto que entre en casa es la de La Newyorkina. Y no es solo porque sea asturiana. La única razón es que es la mejor de todas las que he probado. Así que si no la conocéis, os recomiendo probar alguna de sus variedades.

Y granola es lo que lleva este bizcocho. Y nata y limón deshidratado. El resultado, un bizcocho que se desaparecerá en un abrir y cerrar de ojos.

Y además de rico, facilísimo. Tanto que podéis tenerlo listo para la merienda de esta tarde. Sin excusas.

Bizcocho de Nata, Granola y Limón deshidratado

Ingredientes:

3 huevos M
200 gr de nata 34% materia grasa (la nata que se usa para montar, que os veo venir)
250 gr de harina
2 tsp de levadura química/polvo de hornear
30 gr de aceite de oliva suave
100 gr de azúcar moreno
1/2 tsp de canela
80 gr de granola
20 gr de limón deshidratado

Elaboración:

Precalentamos el horno a 180º y forramos con papel de horno un molde alargado de unos 20-22 cm.
Tamizamos harina, levadura y canela. Reservamos.
Batimos muy bien huevos y azúcar, hasta que casi hayan doblado su tamaño. Añadimos aceite y nata y continuamos batiendo.
Incorporamos la mezcla de harina y levadura y batimos a velocidad baja hasta que esté completamente integrada.
Por último añadimos la granola y el limón deshidratado cortado en trocitos. Mezclamos con la ayuda de una espátula.
Vertemos la mezcla en el molde y horneamos a 180º durante unos 40-45 minutos o hasta que al pinchar en el centro el tester salga limpio.
Retiramos del horno y dejamos reposar dentro del molde durante 5 minutos. Luego desmoldamos y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.