Bundt Cake de Fresas

Tras varias maniobras de aproximación, consistentes básicamente en comprobar la calidad del producto, doy por inaugurada la temporada de fresas. Ya no hay vuelta atrás. Desde hoy y durante unas cuantas semanas, estar sentada en el sofá con un bol de fresas en la mano será mi estado natural. Pero tened en cuenta que estoy intentando construir mi casita de verano con esas cajas 😉

Y la temporada no puede empezar de mejor manera que con este Bundt Cake de Fresas. Y no unas fresas cualquiera. Porque las vamos a macerar en vinagre de módena. Vais a ver qué ricas.

Tengo guardada esta receta desde hace un montón de tiempo. Casi el mismo que ha pasado desde que Ana Cook The Cake la publicó. Sí. Soy así. Acumulo recetas como nueces las ardillas. Pero no penséis que se me olvidan. Yo todas las que guardo tienen que ser ejecutadas sí o sí. Lo de cuándo…, es otro tema, posiblemente digno de estudio.

Y como no podía ser de otra manera, el estreno oficial tenía que hacerse en un molde Nordic Ware. Otro de mis favoritos (tengo muchos) es el Elegant Party que podéis encontrar AQUÍ. Es perfecto para esta receta.

Un bizcocho extra jugoso, suave. Con ese toque agridulce de las fresas maceradas en vinagre de módena. ¡Qué os voy a contar yo! Es una auténtica delicia. Y esta tarde pienso hacerlo de nuevo.

Bundt Cake de Fresas

Ingredientes:

• 220 gr de mantequilla en pomada
• 300 gr de azúcar
• 3 huevos L
• ralladura de 1 limón
• 240 gr de harina
• 1/2 cucharadita (tsp) de bicarbonato
• 1/2 cucharadita (tsp) de sal
• 225 gr de yogur griego
• 340 gr de fresas lavadas y cortadas en daditos
• 50 gr de azúcar moreno
• 3 cucharadas (tbsp) de vinagre de módena
• 1 cucharada (tbsp) de miel
• 35 gr de harina (para las fresas)

Elaboración:

1. Empezamos macerando las fresas. Las lavamos muy bien y cortamos en trocitos pequeños. Las ponemos en un bol, añadimos azúcar moreno, miel y vinagre. Mezclamos bien, cubrimos y dejamos reposar durante 1 hora. Pasado este tiempo escurrimos y reservamos el jugo. Pasaremos las fresas por los 35 gr de harina.
2. Precalentamos el horno a 190º y preparamos nuestro molde. Uno de 10 tazas será perfecto. Y si es Nordic Ware ya sabéis que lo que mejor funciona es el spray desmoldante.
3. Tamizamos harina, bicarbonato y sal. Reservamos.
4. Batimos muy bien azúcar y mantequilla, hasta que tengamos una mezcla cremosa. Añadimos los huevos uno a uno, sin dejar de batir.
5. Agregamos la ralladura de limón y 3 cucharadas (tbsp) del jugo en el que hemos macerado las fresas. Batimos de nuevo.
6. A continuación incorporamos la harina y el yogur, alternando entre ambos. Batir a velocidad baja hasta que estén completamente integrados.
7. Por último, añadimos las fresas, poco a poco, y mezclamos suavemente con la ayuda de una espátula.
8. Vertemos la mezcla en el molde (siempre sólo por un lado), y damos unos pequeños golpes para repartir la masa.
9. Metemos el molde en el horno (siempre que utilicemos un molde de chimenea lo colocaremos sobre la rejilla) bajamos la temperatura a 160º y horneamos durante unos 70 minutos o hasta que al pinchar en el centro el tester salga limpio.
10. Retiramos del horno. Dejamos dentro del molde y sobre una rejilla durante 10 minutos. Luego desmoldamos y dejamos enfriar completamente.

No le he puesto glaseado porque para mí así está perfecto. Pero si os apetece, podéis preparar uno rápido añadiendo poco a poco azúcar glas al zumo que sobró de macerar las fresas. Lo dejo a vuestra elección.

¡Venga! ¿Os animáis a prepararlo? Seguro que sí. Os va a encantar.

Natalia.