Creo que soy de las pocas personas en cuya familia nunca hubo una yogurtera, posiblemente el electrodoméstico más de moda durante los años 80. Y estoy segura de que a día de hoy también voy a ser la primera en tenerla, porque soy la única de las tres hermanas que sufre el síndrome de diógenes cacharril. Claro que ya vendrán a comer mis yogures deliciosos 😉 Como este Yogur de Cappuccino que os traigo hoy y con el que se inaugura una nueva sección en el blog.
Durante más de un año he estado realizando el seguimiento de la Multidelices TEFAL. Leyendo miles de comentarios, buscando recetas, mirando comparativas… Y al final me decidí por ella y no por la clásica yogurtera, porque sus prestaciones son mucho más completas. Y ya puestos a comprar un cacharro más, mejor que sea bueno.
Aunque he de decir que el último paso lo dí gracias (o por culpa de) a Gaby, que no para de subir yogures deliciosos a su blog.
Total. Que aunque en esta casa no cabe un trasto más, me lancé. Y tengo que decir que en los dos meses que llevo utilizándola estoy encantada.
He comprado el modelo nuevo, el que los tarritos tienen las tapas azules. Es compacta y casi no ocupa espacio. Viene con un juego de 6 vasos aunque yo os recomiendo que os hagáis al menos con otro juego más. En casa somos dos y solo 6 vasos nos quedaban cortos.
Es muy sencilla de utilizar, con tres programas: yogur, queso y flanes. Viene con un libro de recetas que os servirán de orientación. Lo que aún no he probado es a hacer queso, pero no tardaré.
Al final de la receta he añadido unos trucos o consejos que serán válidos para cualquier modelo de yogurtera, o incluso para todos aquellos que hacéis yogures en casa al modo tradicional.
Yo siempre utilizo como base un yogur natural, aunque en la web Cocinista tenéis todo lo necesario para hacer queso y yogur.
Vamos con la receta.
Yogur de Cappuccino
Fuente: Bikisimas
Ingredientes:
Para 6 yogures
- 750 ml de leche entera
- 2 cucharadas (tbsp) de azúcar moreno
- 5 cucharadas (tbsp) de café Cappuccino con caramelo (el que venden en Mercadona)
- 1 yogur natural
Elaboración:
- Ponemos leche, azúcar y café en una cazuela y llevamos a ebullición, removiendo para que todo se disuelva por completo. Una vez empieza a hervir, retiramos del fuego y dejamos enfriar.
- Colamos la mezcla.
- Ponemos el yogur natural en una jarra y añadimos parte de la mezcla de leche y café. Mezclamos bien. Añadimos el resto de leche y removemos.
- Repartimos en los vasos y colocamos en la yogurtera.
- Seleccionamos el programa 1 (yogur) y programamos 8 horas.
- Cuando finalice el programa, retiramos los vasos y dejamos enfriar unos minutos.
- Ponemos las tapas y guardamos en la nevera al menos durante 4 horas.
No sé si tenéis yogurtera, pero si la respuesta es no, debéis haceros con una ya. Y si seguís mi consejo, comprad la Multidelices.
Trucos para un Yogur Perfecto
Son válidos para cualquier modelo de yogurtera. Recomendaciones que os harán triunfar.
- La leche, mejor si es entera. Tiene más grasa, lo que ayuda a mejorar su textura. Os aseguro que la diferencia de calorías es mínima, solo tenéis que comparar. Y si es Leche Fresca (la que está en la nevera de los supermercados), aún mejor. He probado a hacerlos con leche de soja y el resultado es aceptable. Con el resto de bebidas vegetales no os puedo decir el resultado.
- Yogur base: siempre natural, y aquí sí que podéis jugar con desnatado o entero. Eso sí, que sea de la mejor calidad posible y con una fecha de caducidad lo más larga que encontréis.
- Azúcar: es opcional, y se puede añadir a la preparación, disolviéndola en la leche, o después, una vez terminados.
- Leche en polvo. En alguna de las recetas que os iré subiendo, veréis que a veces añado leche en polvo. No es obligatoria y no la utilizo habitualmente. Simplemente sirve para dar más cuerpo al yogur y que no quede tan líquido. Y eso es simplemente cuestión de gustos. En el caso de utilizarla, siempre la disolveremos muy bien en la leche.
- Podemos utilizar nata, sustituyendo parte de la leche (nunca más de 200 ml). Aporta cremosidad. Si usamos nata, nunca añadiremos leche en polvo.
- Tiempo de programación: mínimo 8 horas, y a partir de ahí, podréis ajustar más en función de cómo de ácido os guste el yogur. Cuantas más horas, más ácido, y también cuajará más. Para mí, el tiempo ideal está entre 8 y 10 horas, dependiendo un poco de la textura y acidez que nos guste. También debéis tener en cuenta, que si «sobrefermentamos» pueden aparecer unas pequeñas bolsitas de suero. No pasa nada, se mezcla bien. Pero nos puede servir de indicativo acerca del tiempo qué debemos tenerlos.
- Reposo: el tiempo de reposo en el frigorífico antes de consumir es importante para mejorar la textura del yogur. Os recomiendo dejarlos reposar al menos durante 4 horas.
- Los ingredientes nunca deben estar fríos. Mejor a temperatura ambiente, o si hemos calentado la leche para infusionarla con algo, dejarla templar. La temperatura de los ingredientes también es uno de los factores que influyen en el tiempo de fermentación.
- En cuanto a la fruta, mejor si es en mermelada o la hemos cocido antes, y mejor al fondo del vaso. Los ácidos de las frutas pueden hacer, con toda probabilidad, que los yogures se corten.
A medida que vaya utilizando el aparato y crea conveniente actualizar estas recomendaciones, lo haré en esta entrada. Estos consejos los encontraréis siempre disponibles en la sección APUNTES DE COCINA.
Natalia.
Gracias ! Ver mi yogur en tu blog me hace mucha ilusión.
Eres una artista. Todo te queda de lujo.
Mil millones de besos.
Solo se copia a los grandes, así que ya sabes… Eres lo más!
Y sin lactosa o de soja, funcionará igual la yogurtera? Mi duda ante la compra es esa, si va resultar bien con esas opciones
No puedo decirte. No he probado. Pero supongo que sin lactosa no debería haber problema