Llevo una semana en la que casi no he salido de la cocina. No sé por qué, pero empecé el lunes como una loca, a preparar cosas, planificando futuras entradas, haciendo pruebas…., vamos, que he sufrido una verdadera «locura bloguera transitoria».
El resultado, una semana de lo más productiva, en la que ha habido de todo, recetas dulces, saladas, masas… Y por supuesto, intensas sesiones fotográficas, en las que una hace lo que puede. Pero ya que hemos tenido un par de días con sol, había que aprovechar esa luz, que las que no tenemos ni idea de fotografía, la luz del día es lo poquito que nos salva.
Y de entre toda esa vorágine de platos, ha salido esta compota. Pera, manzana, muchas frutas secas…, y con «sustancia», que con este frío necesitamos entrar en calor, así que lo mejor es añadirle un buen vino.
No sé a vosotros, pero a mi las compotas me encantan. La de manzana con mucha canela y un toque de ron, me pirra. Así que si sois de los míos, ésta os va a encantar.
Fácil, y con ingredientes que todos tenemos por casa. ¿Os animáis a prepararla este fin de semana?
Ingredientes.-
- 1 manzana reineta
- 3 peras pequeñas
- zumo de 1/2 limón
- 150 gr de azúcar moreno
- 10 gr de azúcar vainilla
- 2 ramas de canela
- 100 gr de orejones
- 120 gr de uvas pasas (moscatel)
- 120 gr de ciruelas pasas sin hueso
- 150 gr de higos secos
- 200 ml de vino tinto
- 50 ml de Vermut (el que me gusta es Yzaguirre)
- 350 ml de agua
Preparación.-
Pelamos y troceamos la fruta. La ponemos en un bol y la rociamos con el zumo de limón para que no se oxide. Reservamos.
En una cazuela, ponemos agua, el vino (uno bueno, no hay que escatimar), el vermut, y los dos tipos de azúcar. Llevamos a ebullición, removiendo suavemente para que todo el azúcar se disuelva. Añadimos las dos ramas de canela, y cocemos durante 8 minutos a fuego medio.
Pasado ese tiempo, añadimos todas la frutas secas, y cocemos 10 minutos, removiendo de vez en cuando.
Por último, añadimos la fruta fresca, y cocemos a fuego medio durante 20 minutos más. Removemos de vez en cuando.
La salsa irá espesando y todo lo que está dentro empezará a caramelizarse. Si veis que os queda muy espesa y os gusta más líquida, podéis añadir zumo de naranja y cocer un par de minutos más.
Retiramos del fuego, y emplatamos. A mi me gusta comerla templada, porque los sabores son más intensos.
Más fácil imposible. Además, es una manera perfecta de dar salida a todas esas frutas secas que se nos van quedando por ahí olvidadas, sobre todo después de las navidades. Y la combinación de pera y manzana, que quedan totalmente caramelizadas, me chifla.
Ya habéis visto que no es nada complicada, y el resultado merece la pena. Así que venga, todos a rebuscar en la despensa y este fin de semana os quiero ver a todos preparándola, ¿vale?
Buen fin de semana.
Besos!
Te ha quedado una compota espectacular y seguro que sabe mejor que se ve en las fotografías. Que por cierto, no te quejes, que siempre tienes unas fotos estupendas ¡al menos a mí siempre me encantan y no creo que sea la única a la que le pasa!
Estoy deseando ver todas las recetas que han salido de tu cocina esta semana ¡tienen que ser una maravilla!
¡Feliz y dulce finde!
http://losdulcessecretosdecuca.blogspot.com.es/
Una receta riquísima, para una puesta en escena fantástica.
Enhorabuena tantas horas de trabajo en tu cocina han merecido la pena.
Besos !!!
Y digo yo que si a esa compota le metes la "minipimer" debe quedarte una mermelada espectacular para poner a una tostada untada de queso en crema…ay ay ay que me pierdoooo! ❤️❤️❤️
¡Muchas gracias!!!
Un beso, Concha!
Pues no lo había pensado, pero ahora que lo dices…. Habrá que ponerlo en práctica, no?
A mí también me encantan las compotas, pero no muy dulces. Te ha quedado con un colorcito riquísimo. Muy rico con la combinación de todos los ingredientes!
Un beso