Hacía mucho tiempo que quería preparar el tradicional Pan de Muerto mexicano. Pero por una cosa u otra, al final todos los años era algo que se quedaba en la lista de tareas pendientes. Hasta que la semana pasada Verónica (El Rincón de los postres) recordó la receta en su Instagram. Y entonces decidí que no lo podía posponer más y me puse manos a la obra.
El Pan de Muerto es una receta tradicional Mexicana que se prepara para celebrar el Día de Los Muertos como parte de las ofrendas. Os dejo el enlace a ESTE ARTÍCULO en el que Mayte nos explica maravillosamente bien una de las tradiciones más importantes de su país. Entre las que se encuentra la elaboración de este pan, con esa forma tan característica y que representa el cráneo y los huesos de los difuntos.
Existen diferentes variantes, según la zona de México en la que se elabora. El azucarado típico de Ciudad de México, el pan de hule (muy moreno) del estado de Michoacan, pan de yema, relleno… Como en todas las culturas, recetas que se han ido adaptando y pasando de generación en generación con el paso de los años.
Un pan dulce, con una miga muy suave y que nos hace recordar a nuestro Roscón de Reyes. Una receta sencilla, pero que merece la pena probar. Ya sabéis que a mí me encantan este tipo de panes, y por fin he conseguido sacarme la espinita.
Con estas cantidades podéis hacer dos panes medianos, por lo que es perfecto para compartir.
Pan de Muerto
Fuente: El Rincón de los Postres
Ingredientes:
- 500 gr de Harina de Fuerza
- 100 gr de azúcar
- 15 gr de levadura fresca de panadería
- 2 huevos M
- 1 cucharadita (tsp) de sal
- ralladura de 1 naranja
- 1 cucharadita (tsp) de anís
- 140 ml de leche entera
- 90 gr de mantequilla en pomada
- huevo para pintar
Elaboración:
- Lo primero que haremos será elaborar un prefermento. Para ello templamos ligeramente 40 ml de leche. Añadimos la levadura y disolvemos. Incorporamos 15 gr de harina y mezclamos muy bien. Tapamos y dejamos reposar durante 30 minutos.
- En un bol, ponemos el resto de la harina junto con azúcar y sal. Incorporamos los huevos ligeramente batidos y el resto de la leche. Mezclamos bien y agregamos el prefermento.
- Mezclamos muy bien.
- Incorporamos la ralladura de naranja, y el anís. Comenzamos a amasar. Cuando la masa tenga cuerpo, añadimos la mantequilla en pomada.
- Amasamos hasta tener una masa lisa y elástica. Formamos una bola y guardamos dentro de un bol. Cubrimos y dejamos reposar en un lugar cálido hasta que haya doblado su tamaño.
- Pasado ese tiempo, amasamos ligeramente y dividimos la masa en dos partes iguales. A su vez, de cada una de esas mitades, separamos 1/3 de masa que dividiremos en 4 partes, con las que formaremos tres huesos y el cráneo. Para el formado del pan os dejo ESTE ENLACE con las fotos del paso a paso que hizo Verónica.
- Colocamos los panes sobre una bandeja, cubrimos y dejamos reposar de nuevo hasta que aumenten su tamaño. Cuanto más fermentados estén, menos se deformarán durante el horneado.
- Precalentamos el horno a 200º
- Pintamos los panes con huevo batido. Horneamos a 200º durante 10 minutos. Bajamos la temperatura a 180º y horneamos unos 20-25 minutos más. Si se doran demasiado, cubrimos con papel de aluminio.
- Retiramos del horno y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
Podemos pintarlos con mantequilla fundida y espolvorearlos con azúcar. O simplemente dejarlos así, como hacen en Ciudad de México. También podéis sustituir el anís por agua de azahar.
Si aún no lo habéis probado, no lo dejéis pasar, porque os va a encantar.
Natalia.
Que rico me gusta estas recetas saludos
¡Pruébalo! Es un pan que está riquísimo