Llega navidad y en esta casa se comen marron glace igual que si fueran pipas. Ha habido veces en las que incluso he tenido que racionarlos. Igual que si fuéramos niños. Y algo muy parecido ocurre con la crema de marron glace. Una vez que abres el bote ya no hay vuelta atrás. Aunque esta vez he conseguido mantener la calma y reservarla para preparar esta Panna Cotta.
No es que sea un postre estrictamente navideño. Y más ahora que la crema podemos encontrarla en cualquier época del año (yo siempre la compro en Club del Gourmet El Corte Inglés), pero es cierto que durante años el marron glace, por ser algo especial y delicado, que se preparaba durante el otoño, se reservaba exclusivamente para estas fechas.
Y como en navidad me gusta comer algo más que turrón y polvorones, esta panna cotta me parece perfecta para la ocasión.
Una receta sencilla, pero que será un éxito.
La panna cotta es uno de mis muchos postres favoritos. En el blog, entre otras muchas, podéis encontrar Panna Cotta de Rosas, Panna Cotta de Cardamomo… Es ese postre que preparas cuando no tienes mucho tiempo libre (o ganas de cocinar), pero necesitas terminar la comida con algo dulce.
Panna Cotta de Marron Glace
Ingredientes:
- 180 gr de crema de marron glace
- 340 gr de nata para montar
- 110 ml de leche entera
- 15 ml de Brandy
- pizca de canela
- 1 cucharada (tbsp) de azúcar
- 1 cucharadita (tsp) de gelatina neutra en polvo (la podéis encontrar en cualquier supermercado)
Elaboración:
- En un bol ponemos una cucharada de agua y espolvoreamos la gelatina. Reservamos.
- Mezclamos bien crema, canela, azúcar y licor.
- En una cazuela ponemos leche, nata y añadimos la mezcla de crema. Removemos para mezclarlo todo bien y llevamos a ebullición.
- Retiramos del fuego e incorporamos la gelatina. Ponemos de nuevo al fuego un minuto más sin dejar de remover para que la gelatina se disuelva por completo.
- Retiramos del fuego y dejamos reposar 5 minutos.
- Repartimos en los recipientes y guardamos en la nevera al menos durante 5 horas.
Como veis, una receta sin complicaciones, pero riquísima.
Natalia.
Pues resulta que la castaña cocida le va que ni pintado a la panna cotta. Porque dicen los expertos en panna cotta, los italianos, que los sabores de este postre deben ser suaves. Un sabor fuerte mata el postre. Así que las castañas cocidas, con su sabor tan sutil es perfecta para esto.
Entonces he acertado, ¿no? Perfecto!
Felices fiestas, Javier.
Cuando le pongo el marrón glase?
Tal y como indico en la receta, el marron glacè se mezcla con azúcar y canela. Y esa mezcla se añade después a la leche