¡Buenos días!
Aunque desde hace años es El Corte Inglés quien decide cuándo empieza la navidad, en esta casa, hasta que no empieza diciembre, está terminantemente prohibido hablar de navidad. Aunque tengo que decir, que desde hace dos años, cuando empecé a pasar por aquí, a finales de noviembre empiezo a preparar muchas de las recetas navideñas, que como se suele decir, verán la luz durante el mes de diciembre.
Por cierto, me he dado cuenta que en el mes de noviembre ¡fue el segundo cumpleblog! ¡Y no he preparado nada para celebrarlo! Me parece increíble, ¡dos años! Dos años en los que he aprendido muchísimo y en los que he conocido gente maravillosa. Por eso, aunque no ha habido tarta de celebración, quiero daros las gracias a todos los que estáis ahí, porque sin vosotros ésto no sería posible.
Pero no voy a ponerme sentimental, que eso no va conmigo. Después de un fin de semana en Madrid con mi amiga Gloria, un fin de semana gastronómico, intenso, en el que no hemos parado ni un minuto, toca volver a la realidad, cambiar el chip y pensar que, queramos o no, tenemos la navidad a la vuelta de la esquina. Y aunque la receta de hoy no es estrictamente navideña, puede ser una idea diferente, un pequeño descanso entre tanto turrón y mazapán.
Como sabéis, el strudel de manzana es uno de los postres más típicos de Austria y el sur de Alemania. Lo más difícil es preparar la masa filo, pero por suerte, hoy en día podemos encontrarla en el supermercado de muy buena calidad, lo que nos facilita mucho las cosas, ya que es una masa que requiere una superficie de trabajo amplia para prepararla como es debido, algo que en nuestras «mini» cocinas cada vez es más complicado.
Aunque desde hace años es El Corte Inglés quien decide cuándo empieza la navidad, en esta casa, hasta que no empieza diciembre, está terminantemente prohibido hablar de navidad. Aunque tengo que decir, que desde hace dos años, cuando empecé a pasar por aquí, a finales de noviembre empiezo a preparar muchas de las recetas navideñas, que como se suele decir, verán la luz durante el mes de diciembre.
Por cierto, me he dado cuenta que en el mes de noviembre ¡fue el segundo cumpleblog! ¡Y no he preparado nada para celebrarlo! Me parece increíble, ¡dos años! Dos años en los que he aprendido muchísimo y en los que he conocido gente maravillosa. Por eso, aunque no ha habido tarta de celebración, quiero daros las gracias a todos los que estáis ahí, porque sin vosotros ésto no sería posible.
Pero no voy a ponerme sentimental, que eso no va conmigo. Después de un fin de semana en Madrid con mi amiga Gloria, un fin de semana gastronómico, intenso, en el que no hemos parado ni un minuto, toca volver a la realidad, cambiar el chip y pensar que, queramos o no, tenemos la navidad a la vuelta de la esquina. Y aunque la receta de hoy no es estrictamente navideña, puede ser una idea diferente, un pequeño descanso entre tanto turrón y mazapán.
Como sabéis, el strudel de manzana es uno de los postres más típicos de Austria y el sur de Alemania. Lo más difícil es preparar la masa filo, pero por suerte, hoy en día podemos encontrarla en el supermercado de muy buena calidad, lo que nos facilita mucho las cosas, ya que es una masa que requiere una superficie de trabajo amplia para prepararla como es debido, algo que en nuestras «mini» cocinas cada vez es más complicado.
Pues hoy os traigo mi particular versión.
STRUDEL DE PERA Y MANZANA
Ingredientes.-
- 2 manzanas reineta
- 2 peras
- 1 rama de canela
- 2 estrellas de anís
- 4 clavos
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- 1 cucharada de ron
- agua
- 100 gr de mantequilla fundida
- 4 hojas de masa filo
- arándanos frescos
- azúcar glas
Preparación.-
Pelamos las peras y las manzanas, les quitamos el corazón, y las cortamos en dados, no muy pequeños. Ponemos en un cazo con un poco de agua, ron, azúcar moreno y especias, y cocemos a fuego medio hasta que la fruta está tierna, pero sin que llegue a deshacerse. Retiramos del fuego, sacamos las especias y reservamos.
Precalentamos el horno a 200º
Ponemos la primera hoja de pasta filo sobre papel de horno y pintamos con mantequilla fundida. Colocamos encima la siguiente hoja y repetimos hasta que tengamos las cuatro hojas unidas (las uniremos siempre con mantequilla fundida)
Pintamos con mantequilla la última hoja, y colocamos la compota en uno de los extremos y repartimos los arándanos por encima. Enrollamos y unimos bien los extremos. Pintamos con el resto de mantequilla fundida, y horneamos unos 30 minutos, hasta que esté bien dorado.
Sacamos del horno y espolvoreamos con azúcar glas.
Lo mejor es comerlo templado, y si al lado ponemos un buen helado de vainilla, será el postre perfecto.
¡Me encanta! tiene que estar buenísimo 😀
La pinta es inmejorable, que apetecible.
Besos crisylaura.
Gracias!
Creo que lo coma en Navidad y los dos meses siguientes!
¡Muchas gracias!
Di que sí, qué aburrimiento con la Navidad presente desde finales de octubre!!!
Aunque ese strudel tiene tan buena pinta que yo no esperaría a navidad, ni a nada para catarlo 🙂
besos
gracias por la receta
status: en el horno!!
¡Ya me contarás!
Hace unos días que preparé un strudel con masa filo , casi igual , sin pera ni arándanos, la próxima vez lo hago así debe ser muy buena esa combinación, ya que solo estuvo muy bueno solo con manzanas, me imagino como será con los otros ingredientes
Pruébalo. Es diferente, pero muy muy rico.
Que pinta!! Esta navidad cae seguro. Gracias por la receta.
Muchas gracias a ti!