Y así, casi sin darnos cuenta, hemos dejado atrás el mes de enero. Las navidades ya están más que olvidadas, muchos ya habréis abandonado los buenos propósitos de Año Nuevo, y otros, entre los que me encuentro, ni siquiera os habréis planteado qué es eso de empezar el año haciendo una lista de lo que en realidad nadie sabe si son buenos propósitos o no. Lo único que tengo claro en este preciso momento es que empiezo febrero con una tarta Tatin de Naranja Sanguina.
Lo bueno del invierno, además del frío, es que es la temporada de las naranjas sanguina. Por desgracia, temporada más corta año tras año, e incluso en muchas ciudades por lo que me contáis, ni siquiera llegan. Por suerte los que seáis de Oviedo las encontraréis en Eliso Alimentación. Y ya os avisé, tocan unas cuantas semanas de recetas monotemáticas… ¡huid mientras podáis!
La receta es una adaptación de una que encontré en el libro CITRUS, uno de mis libros favoritos y que os recomiendo incluir en vuestra biblioteca gastronómica.
Es muy fácil, además de riquísima. Y si no encontráis naranja sanguina, pues con naranja o incluso mandarina.
Tatin de Naranja Sanguina
Ingredientes:
- 2-3 naranjas
- 30 ml agua
- 90 gr de azúcar
- 75 gr de mantequilla
- 1 cucharadita (tsp) de cardamomo molido
- 1 lámina de hojaldre
Elaboración:
- Precalentamos horno a 180º
- Lavar muy bien las naranjas, secar y cortar en rodajas finas.
- Ponemos un cazo (apto también para horno) de 20-22 cm en el fuego. Añadimos azúcar y agua, y sin remover esperamos a que empiece a coger color de caramelo. En ese punto, incorporamos mantequilla en trocitos y cardamomo, y removemos bien.
- Colocamos las rodajas de naranja y cubrimos con el hojaldre, metiendo bien los bordes hacia dentro.
- Pinchamos la superficie.
- Horneamos a 180º durante 30 minutos.
- Retiramos del horno y desmoldamos inmediatamente.
¿La vais a preparar? Seguro que sí.
Buen fin de semana.
Natalia.